¡Hola chicos! ¡Feliz semana! Hoy van a conocer a la mujer emprendedora de septiembre. Ya casi cerramos la temporada y este emprendimiento me encantó. Es un lugar que tiene mucha magia, como dice nuestra emprendedora, un oasis en medio de la ciudad. ¡No me quería ir!

Este emprendimiento se llama Vivero Castillo, está ubicado en San Francisco y está creado por Igliana Castillo, una joven de 27 años oriunda de la ciudad de Veraguas. 

Esta chica creció rodeada de naturaleza, sus padres son amantes de la naturaleza, y desde pequeña le inculcaron esos valores y ese amor que hoy transmite a su negocio.

En este vivero encuentras de todo: plantas, macetas, insumos de jardinería y el primer hospital para plantas de la ciudad. También brinda asesorías de diseño botánico para apartamentos, casas, hoteles, restaurantes y el público en general. Un negocio que tiene 3 años desde su creación y que busca que las personas reconozcan el valor que tienen las plantas, para la salud y para la vida. 

Aprendió sobre el cuidado de las plantas desde muy pequeña y se mantiene instruida y actualizada leyendo libros sobre plantas y buscando información que le pueda servir para mejorar su negocio. Se surte de proveedores locales y está convencida de que cuidar una planta no tiene que ser una tarea complicada.

Algo muy lindo que nos comentó Igliana es que cada planta tiene su particularidad y su cuidado, pero mientras tú conozcas esos cuidados, las plantas van a dar lo mejor de sí para crecer. Yo sé que para muchos el hecho de tener una planta puede ser complicado; pero esta chica lo hace parecer muy fácil.

Igliana aconseja que tengamos paciencia, que las plantas son lo más natural del mundo y que si observamos bien, somos nosotros quienes podemos aprender de ellas, de su resiliencia, de su capacidad para adaptarse al ambiente.

Como servicio adicional, su emprendimiento cuenta con asesorías en caso de que necesites resolver tus dudas o información sobre plantas en casa. Ellos te brindan la información necesaria para que tus plantas crezcan de la mejor forma posible.

Para Igliana, el mejor ingeniero es Dios y su obra más perfecta es la naturaleza y todo lo que podemos aprender de ella. 

Vivero Castillo es más que un negocio, Igliana lo considera una extensión de su casa, se inspira al conocer a sus clientes y al ayudarlos a resolver sus necesidades. 

Gracias a su trabajo, ha podido colaborar con talleres botánicos y de cultivo de plantas para escuelas y la comunidad, promoviendo el amor por la naturaleza un día a la vez. 

La misión de Igliana es dejar un legado verde en Panamá e instruir a las personas sobre la importancia de la preservación ambiental, especialmente en tiempos de cambio climático.

Ella ve su emprendimiento posicionado a nivel nacional y que más personas reconozcan la importancia y los beneficios de estar rodeados de naturaleza.

Las plantas están en todo lo que tenemos: la medicina, la tecnología, y lograr que las personas reconozcan el valor que tienen y darle la importancia que se merece es uno de sus retos más grandes.

Con Eloy, estará trabajando en su estrategia de comunicación para que más personas se enteren de esa misión tan noble y poder posicionar su negocio de forma efectiva. 

Si quieres apoyar su emprendimiento, síguela en redes como @viverocastillopanama o visita Vivero Castillo en San Francisco.

Besos,

Sheldry